lunes, 30 de junio de 2008

CITA CON SABOR A POLLO Y A EX...

“Like anyone would be

I am flattered by your fascination with me

Like
any hot-blooded woman I have simply wanted an object to crave

But you, you're
not allowed You're uninvited An unfortunate slight”

(UNINVITED- ALANIS
MORRISETTE)


Era uno de esos sábados en los que pensaba solamente en dormir, ver pelis y quizá chatear un poco. Tenía una modorra fatal, hasta que sonó mi cell y vi su número, era él…

Luis! Un chico con el que he estado conversando por msn y teléfono (dice que le encanta mi voz pero no estoy tan convencido de ello) hace algunas semanas pero que aún no me decidía a conocer. Me invitó para dar una vuelta por Plaza Vea, busqué alguna excusa razonable pero no la hallé. Me dijo que se sentía solo y bueno, dado que estaba tan sensible (y disponible) esa tarde, accedí. Insistió en encontrarnos en la sirena espantosa de Larco. Me pareció curioso pero no dije nada. Tuve menos de una hora para bañarme, vestirme, acicalarme y quedar listísimo para nuestro encuentro. Todo un record mundial para mí que llego tarde a todas partes.

Por otra parte, él estuvo antes de la hora, oliendo riquísimo pero con nerviosismo dibujado en su rostro. Igual cómo lo vi por la webcam, sólo que sus ojos son más grandes y claros, aunque su rostro algo asimétrico. Nos saludamos cortésmente (la primera impresión puede ser la última, según mi tía), me dijo que tomásemos un taxi y ya. Abrió la puerta para mí (un punto a su favor, bueno dos si incluimos su olor).

Camino al mall me preguntó donde vivía y adivinen! Vivimos en la misma calle pero en diferente edificio. La extraña coincidencia me asustó, me dejó lelo por unos minutos interminables. Digamos que sentí perder el control de la situación pero de todos modos, sonreí toda la velada. Amarga velada porque él no dejaba de contarme de su ex. Estaba dolido porque este ex, lo había dejado por uno más joven. Luego de seis años de relación estable. Merde! Pensé, va a tomarle un tiempo considerable sanarse de eso. Y yo no tengo mucha disposición de doctor corazón. Estuvimos viendo tiendas, su estilo no me gusta mucho que digamos pero eso tiene solución. Nos fuimos a cenar, pollo a la brasa (puaj!), estoy cansado del pollo y quizá de su ex pero continué sonriendo.

Veía mi reloj disimuladamente y pensé que fácil llegaría a casa a ver “Bailando por un sueño” (versión chola). Al momento, me dijo si podíamos ir a mi casa. Me excusé diciendo que mi prima se quedaría a dormir, me dijo que igual se sentía cansado y que me dejaría en la puerta. Tomamos otro taxi, él empezó a fumar y yo que detesto el maldito humo. Seguí sonriendo. Nos bajamos una cuadra antes para evitar que nos viesen juntos. Le agradecí por todo. Me preguntó si podríamos ir al cine un día de estos. Asentí, sonreí le hice una mueca extraña de adiós…

No hay comentarios: